miércoles, 9 de marzo de 2011

Desde su silla lucha día tras día contra su enfermedad,
los años pasan y pesan.
La juventtud se evapora y deja paso a la decrepitud.
Consumido se vende al sueño eterno:
Amargo viaje a la dulce libertad.
Un jardín del que nunca podrás escapar,
prisión para la eternidad.

1 comentario:

  1. ¡Eh! una pasada este poema.
    "Consumido se vende al sueño eterno:
    Amargo viaje a la dulce libertad"

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